Revelaciones Biblicas

Gloria de Dios es encubrir un asunto; Pero honra del rey es escudriñarlo (Proverbios 25:2) Dios encripta una serie de mensajes a través de códigos que poner como unos juegos para que tú escudriñes y descubras grandes misterios porque una vez que los descubres te fascinas más, te impresionas por la manera en que dios hizo las cosas. Hay miles de ejemplos de esto, un solo ejemplo de esto es lo siguiente, resulta que un matemático descubrió un código basado en estudios de rabinos antiguos y detectaron que tan solo en la Toráh se repite un patrón muy interesante que es prácticamente imposible que humanamente se haya hecho, es decir que matemáticamente por cuestiones de estadísticas es imposible que esto se haga solo y que tenga un mensaje congruente y aparte transmitir un lenguaje oculto. Ejemplo: Por medio de un ordenador, una computadora metieron la palabra Toráh en el libro de génesis para haber si aparecía y para ver si había una lógica en la secuencia en la que

REFLEJOS DEL COMPORTAMIENTO HUMANO ENSEÑANZA (PARASHAT) OMER Dios le dice a sus hijos cómo pueden saber si un animal es alimento. Dios dice que si un animal tiene pezuñas hendidas y es rumiante, entonces puede ser comido. Sin embargo, si un animal tiene pezuñas que no están hendidas o no es rumiante, entonces el animal no puede ser comido. De todos los animales en el mundo, dios le dice al que lee la biblia que hay sólo un animal que tiene pezuñas hendidas pero que no es rumiante. Se trata de: "...el cerdo, pues su pezuña está hendida y se separa por completo, pero no es rumiante..." (levítico 11) Dios claramente especifica que para que un animal sea alimento, debe tener sus pezuñas hendidas y debe ser rumiante. Cuando un animal tiene sus pezuñas hendidas, lo que se percibe a partir de su apariencia externa (y ciertamente todos los que miran el animal lo piensan) es que es para comerse. Pero sólo al saber lo que ocurre en el interior del animal se puede saber

Lázaro y el rico: "Infierno y Seno de Abraham". Hasta ahora hemos visto que la Biblia claramente enseña que los muertos están muertos, es decir, están sin conciencia, esperando la resurrección. Esto que reconocemos está en contra de la opinión tradicional que cree que aunque alguien está muerto “su alma sigue viviendo”. Sin embargo ya hemos visto, de una multitud de escrituras, que esta opinión t radicional no puede ser correcta, puesto que contradice a la Escritura. Hay unos pocos pasajes de la Biblia, que siendo mal entendidos, son usados por la tradición para apoyar su doctrina de una supuesta vida inmediatamente después de la muerte. Un pasaje así es la historia del rico y Lázaro que viene en Lucas 16:19-31 que dice: Lucas 16:19-31 “Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y hacía cada día banquete con esplendidez. Había también un mendigo llamado Lázaro, que estaba echado a la puerta de aquél, lleno de llagas, y ansiaba saciarse